lunes, 14 de diciembre de 2009

Aeropuerto

Ayer noche fui a buscar a Bernardo al aeropuerto. Braguita, medias, vaquero apretado, las botas que ya conoceis, sujetador, camiseta transparente y chaqueta de agua. La hora tardia me dejo terreno libre entre el aparcamiento y la terminal. Me quede esperandole fuera en una zona de paso nulo. Es que aunque el vaquero no llamaba dmasiado la atención, los tacones de las botas si!

Llego casi a tiempo y nada mas salir me fui hacia el. Besito en la boca y nos fuimos al coche. Nada mas llegar a casa me pidio por ducharse y cuando salio del baño ya estaba yo en braguita en la cama. Nada mas verme le entro una tremenda erección y sin mas se tiro en la cama, me ordeno ponerme a cuatro patas y me hizo suya apartando el hilo de la braguita. Al poco de correrse me solto una cadera y empezo a masturbarme. Llegamos juntos en unos suspiros poco discretos y caimos rendidos.

Eran las once y me dijo que podiamos salir a buscar comida para llevar porque tenía hambre. Me dijo de vestirme guapa ya que aunque iba a ser un momento, no tendria que salir del coche y le apetecia tenerme sexy.

Me encerré 20 minutos en el baño para prepararme y nos fuimos, el conduciendo y yo al lado con la minifalda llegandome casí a mi entrepierna. No llevaba medias y el frio me puso la piel de gallina, dulce sensación para mi.

Compro comida china, y a la vuelta me dio por frotarme el sexo por encima de la tela de la falda. Le dije que no podía resistirme y que me iba a correr así mientras el conducia. Ralentizo la marcha para poder mirarme por intermitencia y cuando empeze a jalear, acelerando el vayven de mi mano en la tela, se paro en la cuneta para disfrutar de mis dedos de los pies pintados contractandose, de mis piernas apretandose una contra la otra, rozandose con fuerza, de mi boca entre-abierta, mis ojos cerrados, hasta que me corrí en toda mi braga y mi minifalda.

Entonces, reempredio la marcha con una sonrisa en la boca. Nada mas llegar a casa me fui a lavar, me cambie de falda y brauita, y comimos.

Todavia con todo en la mesa me pidio de acercarme, arodillarme y satisfacerle con mi boca. Me deje caer de mi silla, camine hacia el a cuatro patas, le desabroche el pantalon, le saque su miembro medio tieso, y empecé a notarlo crecer con rapidez en mi boca. Su dulce regalo me lleno la boca de su sabor y me acaricio la cabeza un buen rato mientras terminaba de dejar su sexo bien limpio.

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